NUESTRO QUERIDO Y VIEJO AMIGO: EL EDIFICIO

El edificio es un antiguo palacio construido en 1876. Tiene dos partes, separadas por un amplio patio con una riqueza ambiental única en el entorno urbano. La superficie construida sobrepasa los 2000 m2, y dispone de una amplia variedad de espacios que permiten albergar muchos tipos de actividades y usos.

La Casa Invisible se ubica en el noroeste del Núcleo histórico de Málaga, en una zona afectada por la destrucción del tejido social existente y la destrucción del patrimonio heredado. El edificio es un antiguo palacio construido en 1876. Tiene dos partes, separadas por un amplio patio con una riqueza ambiental única en el entorno urbano. La superficie construida sobrepasa los 2000 m2, y dispone de una amplia variedad de espacios que permiten albergar muchos tipos de actividades y usos.

El vínculo mutuamente beneficioso entre el edificio y el tipo de servicios que presta a la ciudadanía es el que dota de legitimidad a un proyecto de estas características. En este sentido deben entenderse las reparaciones, mejoras y cuidados permanentes que han rescatado al edificio del estado de abandono y deterioro desde el año 2007.

La propuesta para su rehabilitación integral sobrepasa ampliamente el modelo del expediente técnico convencional, considerándose como parte sustancial del proyecto cultural de la Casa Invisible. Un proceso gradual y flexible, de intervención mínima, sin aumento del volumen construido, lo cual resulta, con gran diferencia, la opción más sostenible. Y ejemplar para las actuaciones inmobiliarias en el Centro histórico en estos momentos de aguda crisis. Para ello se cuenta con un proyecto de formación de profesionales en patrimonio edificado y en bioconstrucción, basado en la recuperación de las artes y oficios de la albañilería sabia y en la utilización de materiales nobles y tradicionales a los que se une la tecnología actual para potenciar sus ya excelentes prestaciones.

Actualmente se tramita para su homologación e implementación ante la Junta de Andalucía y proporcionará un empleo muy cualificado, cada vez más necesario y demandado. De esta manera la Casa Invisible convierte su propia rehabilitación en el objeto y medio para el desarrollo de los cursos, aunando así, mediante el “aprendizaje experiencial”, enseñanza, necesidad y deseo.