Somos Buñuel

El acuerdo sobre la cesión de uso del antiguo IES Luis Buñuel por parte del Ayuntamiento de Zaragoza a la ciudadanía autoorganizada que le dio vida y que lo venía gestionando desde 2013 es una prueba más de que, cuando hay voluntad, las instituciones públicas tienen herramientas políticas y mecanismos jurídicos para reconocer el sentido colectivo y autoorganizado de los centros sociales. El Centro Social Comunitario Luis Buñuel ya era de la gente, hoy se reconoce por parte de la administraciones local, un paso fundamental para Zaragaza y para el resto de ciudades que celebramos.

Es una alegría para nosotras saber que, desde hoy, la ciudad de Zaragoza, como antes lo hicieran Córdoba, Sevilla, Berlín, Bolonia o Nápoles, se suma a la cada vez más extensa nómina de ciudades europeas en las que desde el máximo órgano municipal se apuesta por afianzar, ya sea a través de ordenanzas específicas, ya de convenios bilaterales, la enorme riqueza social que, hecha de apoyo mutuo y cooperación, tiene cabida en los centro sociales de gestión ciudadana.

La Casa Invisible, garante de otra sociabilidad en una Málaga cada vez más inhabitable y privatizada, es un bien común que también merece ese mismo reconocimiento, tal y como llevamos once años reclamando junto a amplios sectores de la sociedad civil malagueña y estatal. Convine recordar que, durante todo este tiempo, la Casa Invisible y el Ayuntamiento de la ciudad, debido a que el inmueble es de titularidad municipal, han mantenido un proceso negociador. Sin embargo, aunque se han cumplido todas y cada una de las condiciones dispuestas para la firma definitiva de la cesión en uso del edificio de calle Nosquera 9-11, el gobierno municipal del PP, sin dar explicación alguna, rompió unilateralmente las negociaciones el pasado mes de octubre.

Málaga quiere ser un gran polo de atracción cultural, una ciudad abierta y dialogante, pero la Málaga de hoy, ese pretendida Málaga cosmopolita que apenas llega, no dejará de ser un escenario vacío y plenamente artificioso si no tiene la determinación de apostar por espacios para la ciudadanía y de la ciudadanía, como lleva demostrando desde hace más de una década la Casa Invisible.

Sabemos que la transformación política y cultural surge en primera instancia de las prácticas colectivas y los procesos sociales abiertos que surgen con autonomía. El caso el CSC Luis Buñuel vuelve a demostrar lo que llevamos repitiendo muchos años: es perfectamente legal si hay voluntad política. La legalidad y el marco institucional son instrumentos con sentido democrático cuando son capaces de adaptarse a la realidad social, no al revés. Nuestro deseo, por tanto, es que lo anunciado hoy por el Ayuntamiento de Zaragoza sirva como ejemplo para el gobierno municipal malagueño del PP. Mientras tanto, desde la Casa Invisible seguiremos apostando por el diálogo y el consenso para alcanzar, también en Málaga, marcos jurídicos que permitan el despliegue de formulas de gestión e intervención política más democráticas y verdaderamente abiertas a la participación y gestión ciudadana.

Hoy #SomosBuñuel, llenas de alegría seguimos diciendo #LaInviSeQueda porque es más necesaria que nunca.

Comunicado del Centro Social Comunitario Luis Buñuel: http://centroluisbunuel.org/el-bunuel-ya-es-de-la-gente/